Quiero que te vayas,
¡Que te vayas ya!
Quiero extrañarte para siempre,
y vivir pensando que nunca vas a volver.
Convencerme de que no eras lo mejor,
de que nunca me hisiste felíz.
Contar con una mano las veces que sonreí con vos,
compararte con los demás,
y demostrar que no valías la pena.
Corroborar que nunca fuiste sincero,
y sentirme satisfecha al saber que nunca te creí.
Romper con todas mis fuerzas las cartas que escribí,
quemar uno a uno los poemas que te dediqué,
disfrutar de ese espectáculo que arde,
e incendia mis heridas.
Quiero que no estés,
que no estés nunca más,
que sólo seas un recuerdo,
una foto,
un beso,
un abrazo,
que ya no signifiques nada para mí,
saber que nunca lo llegaste a ser.
Desarmar y volver a armar mi cama,
sin que haya rastros de vos...
Matarte de cada pensamiento,
desterrarte de mi vida,
amalgamarte en mis fracasos,
enterrarte para siempre,
sabiendo que nunca voy a poder,
despegarme totalmente de vos.
Natilu.