-El día que te fuiste entendí que no te volvería a ver. Ibas teñida de rojo por el sol de la tarde, por el crepúsculo ensangrentado del cielo. Sonreías. Dejabas atrás un pueblo del que muchas veces me dijiste: "Lo quiero por tí; pero lo odio por lo demás, hasta por haber nacido en él". Pensé " No regresará jamás nunca volverá"-
Pedro Páramo