jueves, 28 de agosto de 2008

Mañana.

Gracias, sí, diciendo las mismas palabras, con diferentes sentidos, sintiendo lo absurdos y poco indicados que fueron los anteriores, desde ahora pretendo usarlos en el momento indicado y a los receptores que se lo merecen, como vos por ejemplo, me hacés muy felíz.

Con mucho para leer, y poca inspiración.