domingo, 5 de abril de 2009

Derrota.

La dualidad me está comiendo la cabeza, cada una de mis neuronas, está captando toda mi atención, no me deja concentrarme, me desconcierta, me duele.
Me doy cuenta, otra vez, que me equivoqué, que la solución que busqué no era la correcta, que no te puedo suplantar, que superás todo, que sos demasiado fuerte para que te pueda vencer, se me parte el corazón.

Por más cariño, confianza y ganas que tenga, él no es como vos, no siento, no disfruto, no me dejás, todo lo comparo con vos, y vos sos el que me completaba, con el que me sentía llena, a pesar de tus miles de fallas y de mi venda en los ojos, conseguías hacer que eso no me importe, no tengo palabras para explicar cómo se siente esto, es una frustación demasiado hueca. No quiero volver a caer en vos, por favor, no quiero caer.

Vale decir que no me arrepiento de nada, que a pesar del vacío, no te quiero desmerecer, es cuestión de una vieja costumbre pasajera, seguís siendo mi respiro de aire puro, mi cable a tierra, el después es lo que me come la cabeza, lo que no me deja dormir, pero vos vas a seguir siendo mi almita gemela, el único que me saca una sonrisa, y eso no lo cambia un momento, ni dos ni tres, aunque haya sido tan esperado para mi, es más, pretendo que vos seas el que me complete, al que no pueda suplantar y no él. Porque como bien sabés, me encanta tenerte cerca, al lado mio, y prefiero quedarme con vos, y que nos ríamos por horas de todo esto, y que te rías conmigo, no voy a volver a caer. Agarráme la mano y no me sueltes por favor. Ayudame a seguir con la sonrisa en la cara. Juguémonos juntos.


Natilu

¿No ves que me caigo? Agarráme la mano...

Misión fracasada

Milagro más.
Milagro menos.








No puede ser que siempre estés para arruiname las ideas.
Aquello que tanto quería, que tanto deseaba, que tanto me costó conseguir, no me lo dejaste desfrutar, porque estabas ahí, estabas presente, te tenía encima de mi cabeza, no puedo creer todavía lo tanto que seguís siendo para mi, me doy cuenta que no te olvidé aún, que te quiero con el corazón, y que vas a seguir dando vueltas por mucho tiempo más.

Mujer tenía que ser yo para se tan indecisa, pero ojalá dependiera de mi, ojalá tuviera la fuerza para desterrarte de mi alma, ojalá esos ojos verdes suplanten aquellos marrones que conocí, y que no me puedo olvidar, ojalá que la luna puueda salir sin ti, ojalá tuviera un poco de amor propio y me dejara de estupideces y de sentirme una arrastrada por vos, ojalá pudiera hablarte normal sin que se me estiren las palabras, ojalá puediera decirte amigo sin que se me estruje el corazón. Y horas después de él, mi inspiración vuelve a tener base eb tus pies, porqué, si tendría que estar escribiendo de él y de lo mágico que lo pasamos pero no, porque fuiste, porque estabas ahí, porque no te pude dejar de mirar, porque no te pude dejar de hablar, porque no te puedo sacar de mi cabeza, porque seguís en cada uno de mis actos, estás en mí, tenés una partecita mia y quiero que me la devuelvas.












Se acabó la magia.