jueves, 19 de febrero de 2009

Si te he visto, no me acuerdo.

"No decimos lo que pensamos. Hace ya tiempo que se nos acabaron las ganas de hablar. Se nos acabaron con el calor. Uno platicaría muy a gusto en otra parte, pero aquí cuesta trabajo. Uno platica aqui y las palabras se calientan en la boca con el calor de afuera, y se le resecan a uno en la lengua hasta que acaban con el resuello. Aquí así son las cosas. Por eso a nadie le da por platicar..."
Nos han dado la tierra, Juan rulfo.

Es más que claro, es la excusa perfecta, el calor. Aunque a vos las palabras nunca te salen, ni cuando hace frío, ni calor, ni templado. Ni tampoco decís lo que pensas. A mi hace ya tiempo que se me acabaron las ganas de hablar. Será cuestión de esperar, el próximo período glaciar o el apocalipsis.

Natilu